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El reciente avance en el caso del secuestro de Luis Guillermo Lagunes Díaz, "DJ Patas", ha devuelto un rayo de esperanza a su madre, Lucía Díaz Genao, después de más de una década de espera, dolor e impunidad.
Lucía Díaz, fundadora del Colectivo Solecito, no solo ha sido madre en busca de su hijo, sino una voz incansable en la lucha por los miles de desaparecidos en Veracruz. Su historia es brutalmente conmovedora, pero no única. Como ella, hay cientos de familias que llevan años golpeando puertas cerradas, enfrentando la indiferencia institucional y cargando con el peso de un sistema que parece diseñado para el olvido.
El caso de "DJ Patas" expone una verdad incómoda, las pruebas existían desde hace años, pero las autoridades no actuaron con la urgencia que el caso exigía.
Es urgente reconocer que esta no es una excepción. Este patrón de negligencia, impunidad y dilación es la norma. El hecho de que un proceso judicial avance después de más de diez años no debería celebrarse como un logro, debería avergonzarnos como sociedad.
Poco se habla del logro del Águila de Veracruz el pasado jueves en el Beto Ávila donde, pese a haber perdido la serie contra los Diablos Rojos de México, lograron sacar el tercer juego y los blanquearon, cosa que no sucedía desde hacía ya 73 juegos.
El año pasado los mexiquenses fueron considerados por muchos el mejor equipo en la historia de la Liga Mexicana de Béisbol y ganaron el título, por lo que esta temporada les toca defender la corona y siguen verdaderamente intratables.
Pese a que este torneo tampoco está siendo el mejor de los veracruzanos, dejaron una mancha en el título de los Diablos como la pasada, cuando fueron los únicos que le ganaron una serie en su camino a la gloria, esperemos salgan motivados contra Algodoneros.