Un grito contra la impunidad

Gustavo Matta, reconocido diseñador mexicano, denunció la desaparición y secuestro de su sobrino, Jesús Muñoz Mata, en Veracruz desde el 20 de octubre de 2024. Jesús, de 35 años, viajaba con dos amigos en Alvarado cuando fueron privados de su libertad tras salir a cenar. La familia, desesperada, hizo público el caso tras meses de silencio, buscando respuestas que las autoridades no han proporcionado.

La familia pagó un rescate tras negociar con los secuestradores, logrando incluso ver a Jesús en una videollamada. Sin embargo, tras recibir el dinero, los delincuentes cortaron todo contacto, dejando a la familia sin pistas sobre su paradero. Este hecho agrava el dolor de una tragedia que refleja la vulnerabilidad de las víctimas en México.

Las autoridades de Veracruz mostraron una preocupante omisión inicial, según Matta. Solo cuando el caso se trasladó a la Ciudad de México, bajo la atención de la Fiscalía General de la República, se iniciaron avances en la investigación. Aun así, Jesús y sus amigos siguen desaparecidos, sumándose a las miles de personas no localizadas en el estado.

Veracruz, uno de los estados con más desapariciones en México, enfrenta una crisis de seguridad que este caso pone en evidencia. La impunidad y la ineficacia de las autoridades locales agravan el sufrimiento de familias como la de Jesús. La denuncia de Matta es un recordatorio de la urgencia de reformar el sistema de justicia.

Gustavo Matta apela a la solidaridad ciudadana, compartiendo la ficha de desaparición de Jesús en redes sociales (

@gus_matta). Su caso es un llamado a no callar ante la injusticia. Si alguien tiene información, puede contactar a las autoridades o a la familia. La esperanza de encontrar a Jesús sigue viva.

Libertad de prensa bajo amenaza

Andrés Pérez Mendiola, director de Portavoz Mx, fue amenazado por el alcalde de Cazones, Veracruz, Miguel Ángel Uribe Toral, tras publicar una nota sobre despidos injustificados el 6 de junio de 2025. En una llamada intimidatoria, el edil le dijo: "Ojalá nunca te pase nada", mostrando una clara intención de amedrentarlo. Este incidente pone en evidencia el riesgo que enfrentan los periodistas en México por ejercer su labor.

Esa misma noche, Pérez recibió mensajes con capturas de una publicación anónima en el grupo de Facebook "Alertas Poza Rica", que advertía: "Andrés Mendiola, ya te vimos, toca levantón de nuevo". Este hecho se suma a agresiones previas, como las que sufrió días antes al cubrir una manifestación en Poza Rica. La prensa mexicana enfrenta un entorno cada vez más hostil.

La respuesta institucional ha sido deficiente. La Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas (CEAPP) solo proporcionó un acompañamiento policial temporal y no ha implementado medidas de protección efectivas. La inacción deja a Pérez y su familia en una situación de alta vulnerabilidad.

ARTICLE 19 exige al Mecanismo Federal de Protección para Personas Defensoras y Periodistas medidas urgentes para garantizar la seguridad de Pérez. También urge a la Fiscalía Especial (FEADLE) investigar con base en el Protocolo Homologado para Delitos contra la Libertad de Expresión. La impunidad, que alcanza el 99.2%, agrava esta crisis.

El caso de Pérez refleja la grave situación de la libertad de prensa en México, donde las autoridades suelen ser las agresoras. Proteger a los periodistas es esencial para la democracia. El Estado debe actuar con seriedad para sancionar a los responsables y garantizar el derecho a la información.