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El baño es parte fundamental de la higiene, y tiene múltiples beneficios tanto para la salud física como para la salud mental. Sobretodo en épocas de calor, bañarse es un alivio y no importa a cualquier hora del día lo hagas.
Sin embargo la psicología identifica algunos problemas emocionales si lo haces más de una vez al día, ya que puede tratarse de un mal hábito que incluso puede dañar tu bienestar, entérate de la razón que hay detrás.
Si bien cuando nos bañamos eliminamos la suciedad, la grasa y los malos olores que puede acumularse en la piel y el cabello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda hacerlo cada tercer día, con el objetivo de estar sanos.
Pese a esta recomendación, también es importante analizar el clima, la actividad física que se haga y las preferencias personales, pero hay peligro cuando el baño se convierte en obsesión, ya sea por mantenerse limpio o ´eliminar las bacterias´ en todo momento.
De acuerdo con Healthline un trastorno mental puede impactar en los hábitos de higiene, ya sea que no tengas ganas de bañarte o arreglarte en varios días o, por el contrario, que no soportes la idea de estar sucio y tengas que lavarte el cuerpo varias veces al día.
El trastorno obsesivo compulsivo (TOC), consiste en presentar obsesiones y compulsiones relacionados a la limpieza y el orden, los cuales interfieren con la calidad de vida de las personas, algunos síntomas o acciones de las personas que los tienen son:
Los comportamientos, además de bañarse varias veces al día son tomar baños muy largos, evitar tocar ciertos objetos que pueden estar sucios o incluso bañarse por algún tipo de estrés, sin embargo bañarse de esta manera tan recurrente puede tener efectos negativos en la salud, algunas personas pueden presentar: