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Dentro de la comunicación, en especial la no verbal, el contacto visual es una de las formas más poderosas. Cuando dos personas se miran directamente a los ojos, se establece una conexión emocional que puede transmitir sentimientos e intenciones, así como estrechar más la relación entre sí.
Sin embargo, el significado de esta interacción varía según la cultura, la situación y la persona que lo realice. A nivel psicológico, según el doctor Robert A. Lavine, es raro que dos personas mantengan la mirada de forma prolongada, pero incluso en el intercambio más breve las emociones están ahí.
La interpretación del contacto visual dependerá de dichas emociones, y del contexto en el que se esté produciendo la conversación. Estos son los ejemplos más frecuentes, identificados por otra experta, la psicóloga Paula Martínez Barral.
La intensidad y la duración de la mirada pueden influir en cómo se percibe un mensaje. Por ejemplo, una mirada intensa y prolongada, si es agresiva o desafiante, puede resultar intimidante. Sin embargo, un contacto visual más moderado y sostenido suele indicar interés genuino en lo que el otro está diciendo.
Esto se refuerza aún más si va acompañado de un leve movimiento de cejas, lo que puede mostrar implicación o comprensión durante la interacción.
Por otro lado, los ojos entrecerrados suelen ser una señal de desconfianza o defensividad, mientras que las pupilas dilatadas pueden indicar que la persona está profundamente interesada o atraída por lo que está sucediendo. Además, el parpadeo excesivo es a menudo una señal de nerviosismo o incomodidad.
Evitar el contacto visual no siempre significa que alguien esté ocultando algo. Aunque muchas veces se asocia con vergüenza o culpabilidad, según el analista de comportamiento Roger Strecker, el evitar mirar a los ojos puede deberse a otros factores, como nervios o incomodidad, especialmente en situaciones de alto estrés como entrevistas de trabajo o citas.
En resumen, las interpretaciones que pueda tener el contacto visual dependen de diversos factores como el contexto y las emociones que se estén experimentando.