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Uno de los lugares más importantes del hogar es la recámara, en especial la cama, un espacio en el que pasamos gran parte de la vida. Pocas veces se pone atención a la limpieza y cuidado de este mueble, sobre todo de las sábanas que la cubren, ya que estamos más preocupados por la cocina o el baño.
Sin embargo, al pasar tanto tiempo en la cama, se debe dar importancia a su limpieza, ya que es imprescindible para mantener la salud física -e incluso emocional-, un bienestar general y por supuesto el descanso adecuado. Y aquí te diremos con qué frecuencia cambiar tus sábanas.
Día con día, las sábanas reciben una mezcla de sudor, células muertas y ácaros que puede convertir las camas en un ambiente de propagación de microbios, de aquí la importancia de cambiar las sábanas con regularidad.
Aquí varía mucho el estilo de vida de cada persona y la higiene que tenga en su persona. Sin embargo no cambiar las sábanas de manera regular puede provocar enfermedades evidentes a las más silenciosas, la más común es la irritación de la piel, que puede ser causada por la acumulación bacterias.
Además tu salud respiratoria también se verá afectada, debido a la acumulación de ácaros del polvo y otros alérgenos que, que al ser inhalados pueden agravar condiciones como el asma y la alergias. Por otra parte, también afectarán la calidad de tu sueño, ya que te costará estar cómodo.
En este sentido, los expertos en microbiología y alergias coinciden en que el intervalo ideal para cambiar las sábanas varia entre 7 y 10 días, en este tiempo las personas mantendrán una higiene adecuada, ya que pasado este tiempo las sábanas pueden contener hasta 5 millones de bacterias por centímetro cuadrado.
Como dato extra, si cambias en este periodo de tiempo tus sábanas, los beneficios serán: